ILUMINANDO A LA MODA

El pasado 20 de septiembre se presentó en el Ego de Cibeles Madrid Fashion Week  el diseñador taiwanés Shen Lin con su colección de primavera-verano 2012 titulada “Hacia Zurbarán”. La colección estaba inspirada en la pintura del artista sevillano del siglo XVII Francisco Zurbarán, cuyos cuadros se caracterizaban por el virtuosismo en la representación de calidades, volúmenes y texturas, por una representación realista de los tejidos y sus pliegues, por los colores contrastados, y por un tenebrismo particular con un trato muy personal de la luz.  El diseñador re-interpretó todos estos elementos, presentándonos una colección artesanal e impecable donde predominaban el uso de los pliegues, cremalleras externas, colores grises, crudos y neutros contrastados con diversos tonos de amarillos, y la mezcla de tejidos como el lino, el denim, el cuero, la napa, el algodón y el tul. La colección quedaba rematada con detalles de orfebrería en tonos dorados y plateados (broches y collares llevados a manera de rosarios). Era una colección realmente interesante.

Pero quizá lo que más llamó mi atención fue la puesta en escena que planteó el diseñador: una música polifónica de voces femeninas que, por momentos armónica y por momentos estridente, creaba una especie de mantra sonoro que evocaba la espiritualidad tanto del pintor como del diseñador; el andar pausado y casi hierático de las modelos, sugiriéndonos imágenes semejantes a las pinturas, pero llenas de moda y belleza; y finalmente la colección propiamente, que en lo personal me pareció maravillosa.

Sin embargo, no pude evitar que me faltara un factor fundamental en esta puesta en escena: la Iluminación. Como sabemos, la Iluminación se refiere al conjunto de dispositivos que se instalan para producir ciertos efectos luminosos, tanto prácticos como decorativos. El arte teatral engrandece la luz como código no verbal, y lo muestra como un lenguaje a partir del cual se crean atmósferas y sensaciones que cambian la percepción del espacio y del tiempo en escena. Gracias a la luz se pueden desarrollar las historias, proporcionando información en una atmósfera creada para cada situación.

Sabemos que el formato de funcionamiento de Cibeles Madrid Fashion Week, (especialmente el Ego Cibeles) implica una cierta neutralidad en cuanto a puesta en escena, debido a cuestiones logísticas necesarias para que en un mismo día puedan presentarse varios diseñadores en un mismo espacio y con un mismo montaje escénico-espacial y de iluminación; pero quizá sería interesante plantearse nuevos elementos personalizables a fin de enriquecer la puesta en escena de cada diseñador y permitirle plasmar un poco más de su personalidad. Dentro de este contexto, la iluminación sería un elemento relativamente sencillo de customizar, y que permitiría a cada desfile de cada diseñador ganar muchísimo en cuanto a teatralidad y puesta en escena.

Utilizando el desfile “Hacia Zurbarán” de Shen Lin, he hecho un ejercicio hipotético para visualizar un poco este planteamiento: Imaginen el contexto escénico que les describí antes (la música, las prendas, la interpretación de las modelos); en Cibeles se suele utilizar una iluminación blanca neutral para todos los desfiles, cuyo objetivo es destacar las prendas, permitir su clara visualización y unificar la presentación de los diseñadores. En este escenario, el desfile de Shen Lin se nos presentó más o menos de la siguiente manera.

Pero, ¿qué hubiera pasado si hubiéramos podido jugar con las lámparas, cerrando su haz de luz de tal manera que sugiriéramos una especie de cruz gigante en el suelo solo con luces y sombras;  si además hubiéramos utilizado gelatinas de color  amarillo y ámbar en las lámparas para crear un ambiente cálido que contrastara con los espacios oscuros presentes en la pasarela; y si además hubiéramos incluido gobos con formas o bien creadas por el diseñador o bien tomadas de vitrales de iglesia o ventanales, creando con ello texturas en el suelo que dieran aún más contenido a la puesta en escena? El resultado hubiera sido algo semejante a esto:

Vemos como un elemento tan sencillo puede cambiar significativamente un desfile, un concepto estético y un mensaje, cómo una herramienta multifacética como es la iluminación, trabajada de forma teatral, puede cambiar el contexto de un desfile, y lo interesante que resultaría aplicarlo a tantas otras actividades relacionadas con la moda. Esto no es más que una visión teatral llevada a la moda, que a fin de cuenta es de lo que va este blog.

En nuestra próxima entrada, indagaremos en la unión dramaturgia-moda!! No pueden perdérselo!! Los espero!!